Es responsabilidad del conjunto de la escuela “invitar a la
familia” a implicarse en el Plan
Institucional: AYUDA a AYUDAR, de manera
gradual, de esta forma se concretar una ayuda ajustada a las características de
cada alumna y alumno para que le permita aprender más y mejor en toda su
trayectoria escolar que es compleja y por ello requiere del apoyo de la familia
en un continuum de tareas orientadoras que son acordadas con la escuela
mediante la Alianza: Familia – Escuela. Está “alianza” se realiza en el marco
de un “enfoque sistémico y colaborador”, donde los alumnos y alumnas aprenden y
se desarrollan en distintos contextos educativos que mantienen relaciones
sistémicas entre sí, lo que supone intervenir sobre todos ellos, dando
prioridad a la relación de colaboración funcional entre la familia y la escuela, donde se
muestren a lo largo del año escolar actuaciones, procedimientos y estrategias
que permitan generar formas más funcionales de colaboración, ya que el alumnado
aprende más y mejor cuando tiene ocasión de vivir un entorno de colaboración
auténtica y de respeto entre su familia y la escuela, generando e incrementando
la comunicación entre dichos entornos a nivel funcional, personal y abierta en
ambas direcciones.
La escuela propone generar un sistema mixto (formal e informal) de relación.
En el sistema formal habrá
reuniones informativas (por lo menos 5 al año, una por trimestre, una cuando
comience el período escolar y otra cuando finalice el período escolar); las
notas escritas del equipo de conducción, de profesores, profesores –tutores,
preceptores o los informes de calificación, o informes pedagógicos y
psicológicos y de la trayectoria escolar del alumnado para conseguir la unión
de esfuerzos y metas compartidas.
Desde el sistema “informal” se va favorecer
puntos de encuentros y colaboración entre familia y escuela, promoviendo el
cumplimiento de objetivos compartidos y acuerdos prácticos de actuación
respecto a los estudiantes.
La Escuela abordara a partir del Acuerdo Escolar de Convivencia la relación con las
familias desde una ALIANZA, teniendo en cuenta una actitud mutua de
colaboración en las formas de actuar y las formas de comunicar poniendo un
marcado énfasis en los principios de
“cortesía, respeto y empatía”, para generar confianza mutua, una orientación y
asesoramiento positivo y un consenso de metas entre Familia y Escuela.
En los momentos iniciales de esta alianza conviene evitar
emitir juicios, aceptando lo que vive cada familia es una experiencia única,
donde se persigue crear una atmósfera de respeto, en las que las familias
puedan expresarse sin temor a ser criticadas de antemano y en la que puedan
percibir una actitud de apoyo por parte de la escuela. Este proceso de atención
a las familias se hace desde una “pedagogía del “Cuidado y de la Presencia” que
tiene como eje central el acompañamiento para contribuir en el establecimiento
de canales funcionales de comunicación y facilitar y potenciar la participación
por parte de las familias en esta Alianza.
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